Las cerámicas de carburo de silicio combinan varias propiedades extremas, lo que las hace insustituibles en numerosas aplicaciones:
1. resistencia de alta temperatura extrema:
Mantienen una resistencia y dureza excepcionales incluso a temperaturas superiores a 1600 °C, exhiben una excelente resistencia a la oxidación e incluso pueden alcanzar temporalmente temperaturas de funcionamiento de 1650 °C. Esta es una de sus ventajas más significativas.
Resistencia de desgaste 2. Excellent:
Con una dureza extremadamente alta (dureza Mohs de 9.2-9.5, solo superada por el diamante y el carburo de boro), su resistencia al desgaste supera con creces la de las cerámicas de alúmina, lo que las hace ideales para el transporte de medios abrasivos ultra-duros y ultra-finos.
3. excelente conductividad térmica:
Esta es una de las diferencias clave de la cerámica de alúmina. El carburo de silicio es un excelente conductor térmico, con una conductividad térmica muy superior a la de la mayoría de cerámicas y metales. Esto lo hace ideal para aplicaciones que requieren una transferencia de calor rápida, como intercambiadores de calor y muebles de horno.
Resistencia a la corrosión 4. Excellent:
Resiste la corrosión de la mayoría de los ácidos (incluyendo ácido clorhídrico hirviendo, ácido sulfúrico y ácido nítrico), álcalis y soluciones salinas, superando a las cerámicas de alúmina en resistencia a la corrosión general. Sin embargo, se corroerá en ácidos oxidantes fuertes (como el ácido fluorhídrico y mezclas de ácidos nítrico e fluorhídrico).
5. alta fuerza mecánica:
Tiene una resistencia a la compresión y flexión muy alta, con una pérdida de resistencia mínima a altas temperaturas.
6. buena resistencia al choque térmico:
Gracias a su alta conductividad térmica y bajo coeficiente de expansión térmica, puede soportar cambios rápidos de temperatura (como enfriamiento y calentamiento rápidos) sin agrietarse, superando con creces las cerámicas de alúmina.